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lunes, 7 de febrero de 2011

Caímos en un juego donde el coco no obedece


Y mira donde hemos llegado, míranos y dime lo mucho que hemos cambiado desde que me acompañas. Mira todo lo que hemos formado con palabras, con una emoción distinta cada segundo, mira hacia atrás por un instante y dime todo lo que hemos construído; nuestro mundo, solo nuestro, la burbuja imaginaria que nos rodea y que nos protege. Campanilla no nos ha abandonado desde el primer día, tampoco creo que lo haga hasta mucho tiempo. Dime que vas a bailar mil canciones más conmigo, dime que me acompañarás en los momentos malos, que con tu presencia las lágrimas se esconderán, demuéstrame que no te irás, porque yo sin tí ya no soy, no soy.. Los lunes no me parecen tan malos, no estoy triste cuando llueve, no me preocupa si me falta algo, tampoco si me pierdo un capítulo de mi serie favorita. A partir de aquel sábado, has girado mi vida 180º, y la verdad, es lo que estaba esperando. Mira la vida, cuántas alegrías te traen, cuántos momentos malos se van con el tiempo, cómo te sorprende y te llena, cómo te demuestra que las cosas buenas, vienen sin avisar.

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